La hipnosis no implica peligro alguno, no existen el riesgo de que por participar de una sesión de hipnosis puedan sufrirse lesiones o enfermedades de ninguna clase, y en general es una técnica inocua y muy beneficiosa.

No se han descrito efectos secundarios graves, no obstante es frecuente que las personas sometidas a hipnosis sientan:

• Cansancio durante las horas posteriores.
• Un sueño muy profundo en la noche posterior a la sesión, y a veces durante días Pesadez en las piernas y en los brazos.
• En algunas ocasiones sensación de frío en todo el cuerpo leves dificultades para hablar con soltura (durante un breve periodo de tiempo).
• Sensación de euforia con mucha energía o un leve cansancio al final de la sesión

Es normal que después de una sesión de hipnosis se sienta un leve adormecimiento, y muchas veces los primeros días posteriores a la sesión se duerme de forma más profunda y durante más horas de lo habitual.

La hipnosis no produce alteraciones de larga duración ni en el sueño ni en ningún otro aspecto de la vida.
Después de la sesión se puede conducir y realizar cualquier actividad de forma normal.

Durante la sesión no se duerme ni se pierde la conciencia en ningún momento, la hipnosis es una técnica que se aplica en personas despierta exclusivamente.